NaturalMente14

59 n atural mente 14 ç sumario www.naturalmentemncn.org Para recibir un correo electrónico cuando salga el próximo número o darnos tu opinión escríbenos a naturalmente@mncn.csic.es Desde la Antigüedad, la zona de Cabo de Palos (Cartagena, Murcia) ha sido un referente para la navegación marítima. Sin embargo, sus fondos rocosos y escarpados, unidos a los fuertes vientos que soplan desde Levante y por el Suroeste, han ocasionado un gran número de naufragios cuyos restos, depositados sobre el lecho marino, conviven junto a una amplia y variada biodiversidad. El yacimiento subacuático En una de las zonas de Cabo de Palos, al este de la Manga del Mar Menor, se localizan tres forma- ciones de origen volcánico: la isla Grosa, el islote del Farallón y La Laja (también conocida como Bajo de la Campana). De estas tres elevaciones, la roca sumergida de La Laja, una formación cal- cárea con una superficie estimada de 100 m 2 , ha supuesto un verdadero peligro para la navega- ción provocando el naufragio de numerosos bar- cos en el entorno de estas islas. A principios de los años 50 del siglo pasado se produjo por casualidad el hallazgo de un im- portante yacimiento subacuático en el entorno del Bajo de la Campana (San Javier, Murcia). En los años 70, el Patronato de Arqueología Sub- marina de Cartagena (actual Museo Nacional de Arqueología Subacuática,ARQVA), bajo la direc- ción de Julio Mas, llevó a cabo diversas campañas arqueológicas con el fin de examinar los restos sumergidos. Se han podido identificar en la zona del Bajo de la Campana tres pecios pertenecientes a es- tadios cronológicos bien diferenciados gracias a los abundantes y ricos restos materiales conser- vados: un barco fenicio del siglo VII a.C. y dos barcos romanos del siglo II a.C. y II d.C. Entre los años 2007 y 2011, con el permiso de la Comunidad Autónoma de la Región de Mur- cia, se inició un proyecto de colaboración entre el Institute of Nautical Archaeology (INA) de la Universidad A&M de Texas y el Ministerio de Cultura de España, bajo la codirección de Juan Pinedo y Mark Polzer, con el fin de documentar y estudiar las miles de piezas sumergidas. Si bien se trata de un yacimiento múltiple, las investigacio- nes se han centrado principalmente en el estudio del pecio más antiguo, el barco fenicio. En las últimas campañas realizadas se han con- seguido extraer más de cincuenta defensas de elefante que, sumadas a las trece descubiertas en los años setenta, hacen de este un cargamento único y extraordinario para la arqueología.Algu- Defensa de elefante procedente del pecio fenicio del Bajo de la Campana 1, y detalle de su inscripción (Museo Nacional de Arqueología Subacuática, Cartagena. Fotografía: Miguel Angel Otero).