NaturalMente 27

57 n atural mente 27 ç sumario Suscríbete Consulta aquí todos los números de NaturalMente e sentir el más profundo asombro. En remotas épocas, América debe de haber sido un hervidero de gran- des monstruos; ahora no hallamos más que pigmeos, cuando se los compara con las razas afines que los han precedido. […/…] Ciertamente, en la larga his- toria del mundo no hay un hecho tan sorprendente como el de los amplios y repetidos exterminios de sus habitantes.” Y ya en las Galápagos: “En mi excursión tropecé con dos grandes tortugas, cada una de las cuales pesaría al menos 200 libras; […/…]. Estos enormes reptiles, rodeados de negra lava; los arbustos sin hojas y los grandes cactus, me transportaron con la imaginación a un paisaje antediluviano”. Refiriéndose a las iguanas de las Islas Galápa- gos, vuelve al repetido prejuicio, pero sin olvidar la cuestión evolutiva: “ El Amblyrhynchus , nota- ble género de lagartos, vive exclusivamente en este archipiélago. Es un animal de aspecto repugnante, color negro, sucio, estúpido y tardo en sus movimien- tos. Varias veces lancé uno, tan lejos como pude, a un profundo charco […/…]; pero invariablemente regresó en línea recta al sitio donde yo estaba. Tal vez esta aparente estupidez pueda explicarse por la circunstancia de no tener este reptil enemigos de ningún género en la línea de la costa, mientras que en el mar debe ser presa de los numerosos tibu- rones […/…] Tócame hablar ahora de la especie terrestre que tiene la cola redonda y los dedos sin membranas. […/…] Como sus hermanos los lagar- tos marinos, son animales feísimos, de un tinte entre anaranjado amarillento y rojo pardusco; su ángulo facial, casi nulo, les da un aspecto singularmente es- túpido […/…] Resulta, pues, interesantísimo hallar un género bien caracterizado, con sus especies ma- rina y terrestre circunscritas a una porción limitada del globo” . Ya en Australia, en su viaje de vuelta habla del ornitorrinco: “ ciertamente es el animal más ex- traordinario que se haya visto; los ejemplares dise- cados no dan idea exacta de la cabeza y pico del Ornithorhynchus recién muerto, porque el último se endurece y contrae” Una de las reflexiones finales de su viaje jus- tifica lo que comentaba al principio del artículo: “ Tan hondas satisfacciones he gozado en mi viaje, que no puedo menos de recomendar a los natura- listas, aunque no esperen ser tan afortunados en sus campanas como yo lo he sido, que aprovechen toda ocasión de viajar, por tierra, sí es posible, y si no, emprendiendo una larga navegación. […/…] Por lo que hace al efecto moral, los resultados deberán ser adquirir paciencia jovial, libertad de sí mismo, hábito de obrar por cuenta propia y de hacer lo mejor en cada caso” n Una de las reflexiones finales de su viaje, “Tan hondas satisfacciones he gozado en mi viaje, que no puedo menos de recomendar a los naturalistas aprovechen toda ocasión de viajar”

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