NaturalMente 28

7 n atural mente 27 ç sumario Suscríbete Consulta aquí todos los números de NaturalMente Su cr como genialmente ordinario. Aunque cuando uno ve en la exposición sus di- bujos científicos, hechos a mano alzada, con un microscopio monocular, viendo lo contrario a lo que veían todos, anticipándose a lo que luego el avance de la tecnología corroboraría, uno piensa que esa normalidad en Cajal se queda un poco corta.Y es que Cajal era un visionario, en el senti- do más literal (su visión a través del microscopio era fascinante) y científico de la palabra. Porque no solo dibujaba lo que veía, también dibujaba lo que no veía, interpretaba lo que creía que po- dría ser y lo que no era.Y tal fue su empeño en demostrarlo, que al presentarse en el Congreso de Berlín, sin hablar apenas alemán, logró im- presionar a uno de los mejores histólogos de la época que, sin quererlo, hizo uno de sus mejores “Cajal era un visionario porque dibujaba lo que veía y lo que no veía e interpretaba lo que creía que podría ser y lo que no era. Así, dejó impresionado a uno de los mejores histólogos de la época sin hablar apenas su idioma” descubrimientos científicos: descubrió a Santiago Ramón y Cajal. Consiguió visibilizar lo invisible, contrariar lo asentado, pasar a la historia de la ciencia universal y además ser un hombre normal. ¿O quizás no? “El verdadero sistema nervioso nunca duer- me”, decía. El suyo solo durmió cuando murió, ni siquiera segundos antes. n Fotografía en color relalizada por Santiago Ramón y Cajal que fue pionero en este tipo de fotografía // Instituto Cajal (CSIC) Junto a su familia disfrutando de una tarde de asueto Instituto Cajal (CSIC) Cajal junto a con miembros del Gaster Club, enValen- cia. Instituto Cajal (CSIC)