NaturalMente 31

76 n atural mente 31 ç sumario Suscríbete Consulta aquí todos los números de NaturalMente Septiembre 2021 había monte y campo. Me gustaba estar sola y perderme. Esconderme en el sotobosque y ob- servar. Estoy muy agradecida de haberlo recupe- rado. Por supuesto que ha cambiado mi relación con la naturaleza, ahora no podría vivir lejos de ella. La naturaleza me ha ayudado a recuperar el llanto, a llorar, sin importarme dónde ni cuándo. Había dejado de hacerlo pretendiendo ser más fuerte… y retirarme de una sociedad que tiene miedo a aquellos que lloran o que los tacha de débiles, me ha ayudado a darme cuenta de que la verdadera fortaleza está en el llanto. Solo los fuertes reconocen el dolor, solo los fuertes sa- ben compartirlo y expresarlo y solo a los fuertes no les importa mostrar su vulnerabilidad, y ahí es donde todos nos encontramos, en el dolor. Todos llevamos un dolor dentro. Compartirlo es de carácter fuerte.Y también destacaría que me ha ayudado a ser paciente y, curiosamente en la distancia, me he acercado más a mi fami- lia y a la importancia de recuperarla, mimarla y tratar de comprenderla.También me ha ayudado a ensalzar la bandera de la individualidad ante la masa homogénea de la sociedad. Defender mis peculiaridades, mis rarezas, mis carencias y amar mis defectos. No quiero parecerme a la mayoría, quiero ser yo. ¿Qué ha sido lo más duro de vivir en Nia- dela? ¿Y lo mejor? Lo más duro ha sido el proceso de adaptación de una mujer integrada en la sociedad y urbanita, a la soledad, la incertidumbre y no tener ningún control sobre lo que puede ocurrir. Lo más duro ha sido desarmarme, desnudarme, comprender- me, al fin.Ahora pienso que la vida debe ser así. Lo mejor ha sido aprender a practicar el “amo- rismo”. Es ahora mi religión.Afrontar todo y a to- dos desde el amor. Contra el amor es difícil ganar una batalla, con amor todas las batallas se ganan. ¿Crees que estamos preparados para so- brevivir en la naturaleza? Si yo he podido, cualquiera puede. Pero debe partir de una necesidad. Sin necesidad no existe la posibilidad de adaptación como meta y desen- lace. ¿La literatura es un medio adecuado para acercar la naturaleza y la importancia de conservarla a la sociedad? Cualquier medio es adecuado. Solo requiere curiosidad y necesidad de conocimiento sin jui- cios. Si ahora mismo te pudieras convertir en un ani- mal de los que has visto y te han acompañado en Niadela, ¿cuál elegirías? Cualquier ave…Todas son hermosas y libres. ¿Qué mensaje le darías a la gente que to- davía no está concienciada sobre la impor- tancia de la conservación y protección del medio ambiente? Recordarles que es nuestro verdadero y genui- no entorno natural.Al que realmente pertenece- mos, de donde partimos hace miles de años y a donde, por el bien común, deberíamos regresar. La naturaleza es el verdadero hogar. Te invita al diálogo. En el silencio de la soledad uno dialoga consigo mismo. “La palabra es sanadora”, decía Freud. Ahora se han sanado muchas cosas que nunca dije. Y ha sido en el silencio que he podido escribir las palabras que necesitaba decir. Walter Benjamin en su ensayo La crisis de la novela, publicado en 1930, escribe: “El lugar de nacimiento de la novela es el individuo en su so- ledad”. Para Benjamin no hay ninguna duda de que, si la mayoría de las personas están oprimi- das, su narración también lo estará. La soledad descomprime. Conservando nuestro verdadero hogar, nuestro entorno natural, nos conservamos a nosotros mismos como especie. Somos parte de ese todo y ese todo es parte de nosotros. Protegerlo es protegernos n “La autora y nuestra institución, comparten algo: el amor por la naturaleza y el afán por su conservación.” “La curiosidad y preguntas de Beatriz Montañez eran infinitas, como las de una niña pequeña que entra por primera vez al Museo”