NaturalMente 22

11 n atural mente 22 ç sumario Suscríbete Consulta aquí todos los números de NaturalMente orgulloso de su militancia política y masónica. Durante su exilio siguió luchando por la legitimi- dad republicana y ocupando importantes cargos en las logias de Bogotá y Caracas. El Gobierno de la República lo nombró Di- rector General de Minas en 1936, tras el triunfo electoral del Frente Popular. Cuando estalló la Guerra Civil, Royo acababa de ocupar dicho car- go, de gran importancia estratégica en un con- texto bélico y que le obligó a arduas negocia- ciones con los sindicatos de mineros y asumir arriesgadas misiones durante el conflicto. Los fuertes bombardeos y el asedio de la ca- pital provocaron el traslado desde Madrid hasta Valencia del Gobierno republicano en Noviem- bre de 1936, lo que supuso también el despla- zamiento a la capital del Turia de los gestores, estrategas e intelectuales que trabajaban al ser- vicio del legítimo Gobierno. Durante ese perio- do en que Valencia fue capital de la República, Royo Gómez vivió allí con su familia. Además de su cargo político, se implicó personalmente en la evacuación de los archivos y laboratorios del MNCN, del que fue nombrado en esa épo- ca Director. Supervisó el traslado desde Madrid de los laboratorios e instaló la sede del Museo en el antiguo edificio del Hospital de Sacerdotes de Valencia, donde, a pesar de su fuerte implica- ción en las tareas políticas que le fueron enco- mendadas, no dejó de investigar y de recolectar ejemplares para sus colecciones. Por encargo del Gobierno encabezó la representación de la ciencia española en uno de los más importantes eventos internacionales, el Congreso Geológico Internacional que se celebró en Moscú en el año 1937, de enorme interés mundial, pues por pri- mera vez se hacía una evaluación de las reservas mundiales de petróleo y de los depósitos soviéti- cos de carbón.Allí coincidió con la delegación de españoles que participaban también en el Festi- val Internacional de Teatro de Moscú, y coincidió con artistas, como Rivas Cherif, Gloria Álvarez Santullano y el poeta Miguel Hernandez. “Siempre estuvo orgulloso de su militancia política y masónica. Durante su exilio siguió luchando por la legitimidad republicana y ocupando importantes cargos en las logias de Bogotá y Caracas” El Salón del Diplodocus del Museo de Ciencias Naturales en agosto de 1934. Foto:Vicente Sos.Archivo MNCN. ACN001/003/03159

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