NaturalMente 24

85 n atural mente 24 ç sumario Suscríbete Consulta aquí todos los números de NaturalMente “Durante el Mioceno gran parte de Madrid formaba parte de una cuenca sin salida al mar. La lluvia que caía llegaba a través de arroyos y pequeños ríos a la zona más profunda de esta cuenca” Figura 1. Perfil esquemático del valle de un río: a) situación simple, b) situación modificada por un glacial, c) situación modificada por una fractura geológica. Las características de los ríos varían mucho a lo largo de su curso. Desde su origen hasta su desembocadura en el mar, la pendiente de un río disminuye gradualmente, lo que se llama “perfil de equilibrio”. Cuando la pendiente es mayor, el agua corre con más velocidad y el río tiende a erosionar, llevando río abajo la roca en forma de piedras, arena, arcilla y material disuel- to. Cuando la pendiente es menor, el río pierde fuerza y deposita estos materiales, primero los más gruesos y al final los más finos. Cuando llega al mar, deposita la carga restante, formando un delta (Figura 1a). En una situación estable, la altura del río va dis- minuyendo gradualmente hasta el mar (Figura 1a), pero esta situación puede verse modificada por motivos geológicos y/o climáticos. Después de una alteración, el río tiende a recuperar su “perfil de equilibrio”. Las fracturas geológicas pueden le- vantar o bajar una parte del terreno con un río y alterar el patrón de erosión y deposición (Figura 1c). El clima tiene variaciones cíclicas, dando lugar a periodos glaciales e interglaciales. El norte de Eurasia y América son zonas de mucha precipi- tación. Gran parte de esta precipitación es agua evaporada de la superficie de los océanos y du- rante los periodos interglaciales este agua vuelve a los océanos. Durante las etapas glaciales, parte de esta precipitación en forma de nieve se acu- mula en capas de hielo de hasta varios kilómetros de espesor. Como resultado, en tiempos glaciales puede haber un descenso de hasta 130 metros del nivel de los mares y de la desembocadura de los ríos. Para restablecer su “perfil de equilibrio” el río incide más profundamente en el substrato (Figura 1b), inicialmente lo hace cerca de la costa y el efecto se desplaza río arriba. El resultado es que en un tramo del río donde antes había de- posición de terrazas hay una fase de incisión. En el último millón de años ha habido casi 10 ciclos en los que se han sucedido los periodos glaciales con los interglaciales, provocando una alternancia entre incisión y deposición en gran parte del cur- so de los ríos. En situaciones en las que la incisión predomi- na, por razones climáticas o geológicas, los ríos excavan valles más profundos, dejan sus antiguas llanuras de inundación o vegas como terrazas, y forman nuevas vegas a una altura inferior (Figu- ra 2). Las terrazas se señalan con su elevación sobre el nivel del río actual y cuanta más altu- ra tienen, más edad. Las terrazas con la misma A) B) C)

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