9
n
atural
mente
14
ç sumario www.naturalmentemncn.orgPara recibir
un correo electrónico cuando salga el próximo númeroo
darnos tu opinión escríbenos a
naturalmente@mncn.csic.esextraordinaria diversificación y desarrollo de las
fanerógamas en el medio aéreo.
Las algas, por lo general, presentan un tamaño
relativamente pequeño, que no suele superar al-
gunos decímetros de altura. Por ello, la vegeta-
ción marina no alcanza la complejidad y enver-
gadura que encontramos en el medio terrestre.
Hay algunas excepciones, como las algas lamina-
riales, de mares fríos y templados, que pueden
medir varios metros y en algunos casos, como las
especies del género
Macrocystis
, superar los 30 m.
Estas algas sí pueden constituir en algunos lugares
auténticos bosques submarinos, pero la superfi-
cie total que ocupan es muy reducida, en relación
a la que ocupan la totalidad de mares y océanos.
Aunque las algas son los vegetales dominan-
tes en el mar, un reducido número de especies
de Angiospermas (alrededor de 60 en todos los
océanos) se han adaptado de forma secundaria a
la vida en el medio marino. Precisamente, estas
plantas, con su desarrollado sistema de rizomas,
se adaptaron con éxito a ocupar los extensos
fondos sedimentarios poco profundos, que hasta
entonces permanecían desiertos. Así, las angios-
Las cifras de la biodiversidad
De todo lo comentado con anterioridad, cabría
pensar que mares y océanos albergan una biodi-
versidad muy superior a la del medio terrestre
por las razones señaladas: a) el espacio disponible
para la vida es muy superior, b) la vida se originó
en el mar, así como todos los grandes grupos ani-
males conocidos, c) la evolución ha transcurrido
mucho más tiempo en este medio, y d) las formas
y posibilidades de vida son también mayores. Sor-
prendentemente, si acudimos a las cifras reales de
la biodiversidad, medida en número de especies,
el medio terrestre supera con mucho al marino.
Si nos referimos a los organismos (plantas y
animales) pluricelulares descritos, en el medio te-
rrestre se conocen cerca de 1.375.000 especies,
de las cuales unas 345.000 son vegetales (un 78%
fanerógamas) y alrededor de 1.030.000 animales
(el 85% insectos). Por el contrario, en el medio
marino sólo se conocen unas 250.000 especies,
de las cuales 30.000 son vegetales (casi todas al-
gas) y unas 220.000 animales. Estas cifras suponen
que el medio marino albergaría sólo alrededor
del 15% de las especies pluricelulares conocidas
en el planeta, que suman alrededor de 1.625.000.
Estos datos son los referidos al número de es-
pecies, pero la diversidad también puede estimar-
se como el número de formas de vida o de gran-
des grupos taxonómicos. En este caso, la balanza
se vuelve bruscamente del lado del medio mari-
no. De los 33 filos o grandes grupos animales, 32
de ellos están presentes en el medio marino, 16
de los cuales son exclusivos de este medio y 8
mayoritarios en él. En las aguas dulces están re-
presentados 16 filos, ninguno de forma exclusiva
y solo dos de ellos predominan en este medio
(de los cuales 1 es enteramente parásito). Por úl-
timo, solo 10 filos están presentes en el medio
terrestre y, de ellos, únicamente uno es exclusivo
La vida se originó en el mar, pero a lo largo de la evo-
lución han sido numerosos los intentos de conquistar
el medio aéreo con menor o mayor éxito. /Guillermo
Alonso-Blanco..
permas marinas ocupan hoy día amplias exten-
siones de los fondos someros y constituyen en
los mares templados y cálidos uno de los ecosis-
temas litorales más importantes y característicos,
las denominadas “praderas submarinas”, las cua-
les desempeñan un importante papel en la diná-
mica, biología y redes tróficas costeras.
“El agua del mar contiene
muchos nutrientes, lo que ha
determinado que buena parte
de los grupos de animales
marinos se hayan adaptado a
alimentarse de forma pasiva”